Lo que traía puesto…

Espectáculos
Typography

Ciertamente estuvo en Broadway dos años y medio pero no en los escenarios de fama. Además, es evidente que se trata de una obra de bajo presupuesto.

Amor, Dolor ¡Y lo que traía puesto!,  dirigida por Francisco Franco y adaptada por María Rene Prudencio, está ahora en el teatro Insurgentes.

Deriva de un éxito literario de Ilene Beckerman, sobre memorias de su vida, que Nora y Delia Ephron llevaron al escenario.

En México intervienen las actrices Silvia Pinal, Susana Zabaleta, Diana Bracho, Gabriela de la Garza y Mariana Treviño, con una actuación que responde a su prestigio.

Cada una, por su experiencia, cumple de sobra con el papel asignado. La calificación es de ¡10!

Las imágenes retro en pantalla que enmarcan su actuación demuestran una selección de primera.

Es exacta la sincronía de labios o playback  con la canción ¿A dónde va nuestro amor? de Angélica María.

Se escucha armoniosa la interpretación que Susana Zabaleta hace del “triste” teniendo como fondo la versión original de José José.

La lectura en atril de las  historias del cáncer de mama, la violación y el homosexualismo confirman la calidad de las actrices. El baile de Silvia Pinal es motivador y encanta.

El detalle es que Amor, Dolor, ¡Y lo que traía puesto! s se queda corta y no ilusiona al público. En otras palabras,  hay una espléndida actuación por encima de una obra que en teatro no deja el mismo y delicioso sabor de la prosa de la escritora norteamericana Beckerman.

Arturo Zárate Vite

 

 

Maestro en Periodismo Político por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Titulado con mención honorífica.

Se ha desempeñado en diversos medios, entre ellos, La Opinión (Poza Rica, Veracruz) Radio Mil, Canal 13, El Nacional, La Afición y el Universal.

Más de cuatro décadas de experiencia, especializado en la información y análisis político.

Ejerce el periodismo desde los 16 años de edad.

Premio Nacional de Transparencia otorgado por la Secretaría de la Función Pública, IFE, Consejo de la Comunicación, Consejo Ciudadano por la Transparencia e Instituto Mexicano de la Radio.

Su recurso para la protección de los derechos políticos electorales del ciudadano logra tesis relevante en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con el fin de conocer los sueldos de los dirigentes nacionales de los partidos.

Además, ha sido asesor de la Dirección General del Canal Judicial de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y Coordinador General de Comunicación y Proyectos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Autor del libro ¿Por qué se enredó la elección de 2006, editado por Miguel Ángel Porrúa.