Poder legislativo
Senadores comprobaron el jueves pasado (25 de noviembre) que para dirimir diferencias no se requiere llegar a empujones, jaloneos y pisotones como ocurrió el día que Rosario Piedra Ibarra rindió protesta como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
En esa ocasión, el senador Gustavo Madero fue a dar al suelo, como quizás nunca antes le había sucedido como legislador, inconforme con el procedimiento para validar el nombramiento de Rosario. Entre trompicones logró cumplirse con el protocolo legislativo. El jueves pasado, desde su escaño, sentado, sin intercambiar ofensas, en un marco de respeto, Madero pudo cuestionar a Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política.
Lanzar ofensas no ha sido acción exclusiva de un solo género, lo han hecho senadores y senadoras, entre ellos, entre ellas y entre todos. Tampoco se han salvado invitados o comparecientes que han tenido que aguantar, calladitos, variedad de insultos y hasta humillaciones.
Escenarios que volverán a presentarse, la pasión de la política a veces se desborda o es desbordada por quienes no se distinguen por el respeto y prefieren la provocación, la violencia verbal, cuando juzgan que está perdido el debate en la tribuna y la votación.
Lo del jueves fue otra cosa, como diría al final la presidenta de la mesa directiva Olga Sánchez Cordero, motivada por lo visto y escuchado: “¡Cámara Alta!” Ahí está el video para observar el orgullo de su expresión, porque el debate había sido de altura.
Todas y todos estaban satisfechos con lo presenciado, la confirmación de que no hay necesidad de echar mano del insulto para debatir. El tema era polémico y va a seguir. El acuerdo del Ejecutivo para agilizar obras del gobierno, declararlas de seguridad nacional, con la finalidad de que no se atoren en el burocratismo. La oposición considera medida opaca y contraria a la Constitución, por eso la solicitud de medio centenar de senadores para que la mesa directiva interponga controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
El acuerdo presidencial tuvo como su defensor en tribuna al mismo Ricardo Monreal, que no dejó pregunta sin contestar. Todas las que quisieran sus compañeros de oposición. No fue exactamente una cátedra de salón universitario, como las que da a sus alumnos de posgrado en la UNAM, pero no desaprovechó la oportunidad de llamar su atención para que registren la coincidencia o congruencia de lo que dice dentro y fuera del aula.
De las tantas preguntas, hubo una que parecía acorralarlo, que le exigía definición: ¿Es o no constitucional el acuerdo del Ejecutivo?
Monreal respondió en sentido afirmativo, a reserva de lo que pudiera resolver la Corte, si le llega la controversia.
La ministra con licencia, ahora presidenta de la mesa directiva, Sánchez Cordero, informó que ya había dado instrucciones al área jurídica del Senado, para que analice el camino que debe de seguir la petición. Admitió que tiene dudas sobre si ella puede y debe ser el conducto para plantear la controversia constitucional en la Corte.
Debate respetuoso, aleccionador, con el ingrediente, esencial, de que había en la tribuna y en los escaños especialistas en Derecho, con la capacidad de saber preguntar y responder.
En síntesis, el Senado recobró altura.
En el Palacio Legislativo de Donceles, donde estuvo la Cámara de Diputados federal y ahora despachan los diputados del Congreso de la Ciudad de México (CDMX).
Ubicado en la esquina de Donceles y Allende, en el Centro Histórico. Fue construido por órdenes de Porfirio Díaz, a principios del siglo pasado, donde estaba el Teatro Iturbide…
El entonces presidente de México solo pudo visitar el Palacio de Donceles cuando lo inauguró el primero de abril de 1911. El levantamiento armado en contra de su gobierno lo obligó a presentar al mes siguiente su renuncia.
Hay quienes dicen que se revolcaría en su tumba si supiera que en el vestíbulo del Palacio de Donceles están las máscaras mortuorias de los generales Pancho Villa y Emiliano Zapata, jefes revolucionarios y enemigos de lo que era visto como una dictadura.
El Palacio Legislativo de Donceles es de estilo afrancesado, su candil que ilumina y adorna el salón plenario fue traído de Europa, tiene 415 focos y pesa 750 kilos.
La mesa principal que utilizan los integrantes de la directiva del Congreso es la original, la misma que ocupó, al menos en dos ocasiones, el presidente Francisco I. Madero.
Fue sede de la Cámara de Diputados por 70 años, con episodios que hicieron historia.
Episodio de horror el día que el diputado oaxaqueño Jorge Meixueiro se quitó la vida en la tribuna del salón de sesiones.
Se puso el cañón de la pistola en la boca y jaló el gatillo.
Ya había sido diputado tres veces, iba por su cuarto periodo como legislador. No contaba que por arreglos cupulares se le daría el triunfo a su opositor y candidato independiente Leopoldo Gática.
Maximino Ávila Camacho, hermano del presidente Manuel Ávila Camacho había negociado la diputación a cambio de que uno de sus protegidos se convirtiera en diputado por otro distrito de Oaxaca.
Jorge Meixueiro no quedó conforme y expuso su caso en la Cámara de Diputados, en funciones de colegio electoral.
Sabía de antemano que no tendría éxito su queja, estaba enterado que sus compañeros, por disciplina partidista, votarían en su contra. Sin entrar en detalles, reveló que al no ser diputado por cuarta vez, tenía compromisos que no iba a cumplir. Justo después de estas palabras, Jorge Meixueiro se quitó la vida en el Palacio de Donceles.
Monumento patrimonio de la nación, donde se aprobó la ley de expropiación petrolera firmada por el general Lázaro Cárdenas.
También, en el Palacio de Donceles, se aprobaron el voto de la mujer, la nacionalización de la industria eléctrica y la mayoría de edad a los 18 años.
Ahí, Aurora Jiménez rindió su protesta como la primera mujer diputados en nuestro país.
Desde la tribuna del Palacio Legislativo de Donceles el presidente Manuel Ávila Camacho informó a la nación que México participaría en la Segunda Guerra Mundial.
Y en esa misma tribuna, el presidente Gustavo Díaz Ordaz reconoció su responsabilidad por los hechos sangrientos del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco.
Parte de la historia del Palacio de Donceles, convertido ahora en sede del Congreso de la Ciudad de México.
El tintero plateado es uno de los símbolos más respetados por los diputados e infaltable en el Palacio Legislativo de San Lázaro.
¿Por qué es importante para los diputados? ¿Por qué se coloca sobre la mesa principal del salón plenario cuando hay sesiones?
La pequeña escultura, hecha toda de plata, tiene una base de 47 centímetros por 35 centímetros de altura. Siempre se coloca frente a quien preside o conduce la sesión legislativa.
El tintero fue hecho por órdenes del general Porfirio Díaz, hace 140 años.
Una escultura que en sus inicios funcionaba como tintero, para que el presidente de la cámara firmara los acuerdos de los diputados.
La pieza original está en el museo legislativo del Palacio de San Lázaro; la réplica es la que se utiliza en el salón plenario.
Cuando es tomada la tribuna del palacio legislativo y, la réplica del tintero no puede ser regresada al lugar donde se guarda, en caso de que los diputados se vean obligados a trasladarse a otra sede, como ha ocurrido en algunas ocasiones, se saca de la vitrina del museo el tintero original y es llevado al sitio de reunión.
El tintero es parte del ceremonial de los diputados; representa los ideales universales de justicia y democracia.
Tiene un águila con las alas abiertas que descansa en el centro sobre una columna; en los costados, la representación o imagen de dos diosas griegas, por un lado, Nike, diosa de la victoria, sostiene una corona de olivo; por el otro, Temis, diosa de la justicia, tiene una espada en su mano derecha.
Es tan apreciado el tintero que los diputados acordaron la elaboración de una réplica a mayor escala que fue colocada en la plaza central del Palacio de San Lázaro.
La escultura mide cuatro metros y medio de base por casi tres metros de altura. Fue inaugurada en marzo del 2018 y tuvo un costo de dos millones 250 mil pesos.
Sobre el tintero original existe la versión no confirmada de que alguna vez fue robado. El historiador Saúl Martínez Ortiz, quien trabaja en el museo legislativo, asegura que no existe ninguna denuncia en este sentido. Por lo tanto, el supuesto robo no pasó de ser un chisme de pasillo en el Palacio de San Lázaro.
Lo que sí es verdad es que el tintero sufrió el incendio de 1909, en el edificio de Donceles del Centro Histórico de la Ciudad de México, antigua sede de la Cámara de Diputados.
La pequeña escultura, ennegrecida por el fuego y el humo, logró rescatarse entre los escombros.
Así que el original, sigue en poder de los diputados, es patrimonio de la nación.
De nuevo la actriz María Félix vuelve a ser polémica ante el deseo de su heredero universal Luis Martínez de Anda y de otros que también creen tener derecho para perpetuar la historia de la sonorense, a once años de su muerte, con una película y serie documental.
Sirva de marco para contar y recordar que María era un mujer admirada y poderosa, no solo en el mundo del espectáculo, sino también en la política. Su frase de que el Centro Histórico de la Ciudad de México olía a orines, detonó el rescate y embellecimiento del primer cuadro capitalino.
Con sobrados merecimientos el gobierno de Francia le otorgó una condecoración a la famosa, respetada y temida artista. Sin embargo, la Doña pasó por alto o ignoró que para este tipo de reconocimientos tenía que solicitar permiso al poder legislativo.
No lo hizo.
En ese entonces teníamos asignado por el periódico El Universal la cobertura de la Cámara de Diputados.
Una de nuestras fuentes confiables nos pasó el dato sobre dicha irregularidad, pero había que confirmarlo. La comisión que tenía que recibir la solicitud de permiso, dictaminarla y presentarla al pleno cameral era la de Gobernación, presidida por el diputado Jorge Moreno Collado. Así que de inmediato fuimos a buscarlo.
Moreno Collado estaba sorprendido. Se quedó pensativo varios segundos, como midiendo el tamaño del personaje involucrado. Admitió que efectivamente la actriz, antes de recibir la condecoración de un país extranjero, requería la autorización legislativa.
De no hacerlo, la sanción era la pérdida de la ciudadanía. Disposición constitucional que fue modificada con el paso del tiempo. Se estableció el camino de la cancillería para ese trámite.
Una vez recabada toda la información, llegué a la redacción con la emoción de que traía la primicia. Daba por hecho que ganaría un espacio en la primera plana del diario. Incluso, no descartaba que fuera considerada para pelear las ocho columnas o el encabezado principal.
Justo cuando estaba por retirarme de la redacción, me mandó a llamar el subdirector Oscar Hinojosa (QEPD). Conversamos un buen rato. Estaba preocupado por la nota y en repetidas ocasiones me preguntó si estaba verificada la información.
Por supuesto que defendí la veracidad de la información. Nunca antes había vivido una situación similar. Existía toda la confianza sobre la información que aportaba día a día. Me extrañó la inquietud de los directivos. Hinojosa justificó su cuestionamiento “porque estamos considerando llevarla de principal”.
Al día siguiente apareció en primera plana, en la parte inferior de la página. No había sido la de ocho columnas. De cualquier manera, suficiente para despertar la ira de María Félix.
A través del prestigiado abogado constitucionalista Ignacio Burgoa Orihuela, en entrevista para el noticiario estelar del canal de las estrellas, arremetió contra el diputado Moreno Collado. Lo calificó hasta de ignorante. El legislador se asustó. Lo llegué a ver con cara de regañado e intenciones de reclamarme.
Dos días después el diputado sonreía. La artista, con discreción, sin hacer más escándalo, corrigió su falta. Fue suficiente con que María Félix hiciera la solicitud correspondiente y le pusiera fecha anterior al día que había recibido la condecoración francesa.
Una muestra del poder político de María Félix.
Es raro que a la oposición en el Senado se le pase lo que ha llamado “bola rápida” o sea una acción legislativa de la que no es enterada, no se entera con oportunidad o no quiere enterarse.
La oposición es la que está más alerta a ese tipo de lanzamientos, por su experiencia, por el dominio que tiene de las leyes del Congreso. La mayoría de sus integrantes, ya contabilizan varias legislaturas. Muchos, incluso, han tenido a su partido en el poder, así que saben lo que se puede intentar o hacer en el terreno parlamentario.
Prueba de que no dejan pasar una, salvo que así lo quieran, es el caso del senador con licencia Miguel Ángel Navarro Quintero (Morena), aspirante al gobierno de Nayarit.
Morena se ha quedado sin un voto, por la sencilla razón de que Navarro no tiene suplente como sus demás compañeros. Por norma, cuando se ausenta el titular, de inmediato, cumplido el procedimiento establecido, el suplente cobra y ocupa el escaño desocupado.
No sucedió en este caso porque el suplente de Navarro fue declarado inelegible. Era ministro de culto religioso y para participar en las elecciones de 2018 no se retiró con anticipación de su ministerio. La ley exige cinco años y él lo hizo dos años antes de la elección.
Por eso Miguel Ángel Navarro Quintero perdió al suplente.
Su interés por competir por la gubernatura de su estado, con amplias posibilidades, va adelante en las encuestas, lo llevó a solicitar licencia y el pleno del Senado se la aprobó a partir del 15 de diciembre del año pasado.
Desde entonces, Morena, que es mayoría en el Senado, se quedó sin ese voto. Los tiempos no están para desentenderse de ninguno. Por eso es que la mesa directiva declaró vacante el escaño, a fin de convocar a elecciones extraordinarias de un senador de Nayarit, con su respectivo suplente, para el próximo seis de junio.
Incluso el Instituto Nacional Electoral (INE) ya había aprobado acuerdos y logística para la realización de dicha elección, en los términos del decreto aprobado en el Senado.
Sin embargo, por lo pronto, el proceso está cancelado. Observaciones y recursos jurídicos de la oposición hicieron que la sala regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con sede en Guadalajara, por unanimidad, revocará lo que habían aprobado el Senado y el INE.
Para los magistrados integrantes de la sala Guadalajara, no existe ninguna vacante, porque hay un senador con licencia temporal o indefinida, Miguel Ángel Navarro Quintero, que pudiera regresar a su escaño, en el supuesto de que perdiera la elección en Nayarit.
Esta “bola rápida” no la dejó pasar la oposición, ha conseguido echar abajo la elección extraordinaria programada para el seis de junio, que se daría en un escenario favorable para Morena, porque su aspirante a gobernador va adelante en las encuestas.
Ni duda cabe que la oposición fue meticulosa en este asunto, detallista, no así en el tema de la ampliación del periodo de la presidencia de la Corte.
La última palabra sobre el caso del senador de Nayarit la tendría la sala superior del TEPJF.
En la disputa por el control o la mayoría en la Cámara de Diputados, los partidos y alianzas van con todo para restarle fuerza al rival. Como nunca antes, la competencia intermedia, que en otros años despertaba menor interés de los participantes. No de diga de electores. El abstencionismo era el rey en cada proceso de este tipo.
Cambió la situación en este 2021 y no es para menos. Está en juego un proyecto que a la oposición no le gusta para nada. Quiere la mayoría, frenar desde la trinchera legislativa la llamada Cuarta Transformación. Establecer contrapesos para no consentir una reforma constitucional más ni una ley secundaria que consideren atente contra la economía nacional.
Por eso la alianza que años atrás nadie hubiera imaginado, al menos en el papel. Ver tomados de la mano a quienes se ha identificado con la derecha, la izquierda y el centro. Juntos, decididos, con el apoyo de otros grupos civiles, a recuperar el espacio de San Lázaro.
No es simplemente ganar la mayoría. Es lo que implica. Lo saben las dos partes en la contienda. Por eso la batalla cada vez más ácida y revoltosa. Escandalosa, sin medida alguna. El ingrediente extra, que la sociedad no desea, pero que ahí está, es la violencia de la delincuencia que aspira, como se supone lo ha hecho en otros procesos, a contar con autoridades electas complacientes con quienes se apartan de la ley.
La Cuarta Transformación también tiene claro el alcance que puede tener el resultado. Está en juego el proyecto del actual gobierno. Para seguir adelante, requiere conservar la mayoría legislativa. El seis de junio es decisivo para uno y otro lado.
Como si fuera lucha libre, en la disputa por la cámara, hay desde piquete de ojos, golpes bajos, puntapiés, pisotones, codazos, dobles llaves, patadas a la cabeza, volteretas, hasta juego sucio. Dispuestos a echar mano de recursos ocultos y peligrosos.
La desventaja de la alianza opositora es que lleva al frente a las mismas caras, personajes desgastados que ya estuvieron en el poder y no cumplieron con sus ofrecimientos de campaña. No se ocuparon ni preocuparon por nominar nuevos valores, gente con perfiles que en verdad puedan ser vistos por los electores como una opción.
En la oposición pesaron más los rancios intereses de quienes están acostumbrados a vivir del presupuesto, que no les importa el color de la camiseta, sea roja, amarilla o azul, con tal de amarrar una posición legislativa que les de fuero.
Nada más que la sociedad ya está harta de lo mismo, es una oposición conocida, que ha decepcionado cuando ha tenido la oportunidad de servir al pueblo, a los gobernados.
Del otro lado está el grupo en el poder. No ha podido concretar todos sus planes. Hay aciertos y desaciertos. Empeñado en llevar a cabo la Cuarta Transformación y no dejarse torcer el brazo.
No la tienen fácil los electores.
¿Por quién votar? ¿Quién va a ganar?
En ese escenario, el voto duro va a marcar diferencia y ya se vio en el 2018 de que tamaño es la fuerza de cada una de las partes.
Ahora que está en curso la reforma judicial, hay episodios de los que se puede aprender para contribuir a perfeccionar leyes. Lecciones de vida del México real que exhiben la impartición de justicia.
Por ejemplo, cuando en un episodio procesal interviene más de una docena de juzgadores, más que los 12 integrantes de un jurado en los Estados Unidos. En el procedimiento del país vecino los 12 se enteran al mismo tiempo del caso. En México los juzgadores que participan al final, por razones humanas y carga de trabajo, no tendrían tiempo pare revisar el contexto y menos el detalle de 10 mil fojas. Ni el proyectista que elaboraría la propuesta de resolución alcanzaría a revisar a fondo el expediente.
¿Por qué una hilera de más de 12 juzgadores para un solo caso? ¿Por qué reabrir un episodio que estaba resuelto? ¿Por qué desestimar el trabajo de los primeros juzgadores, que desahogaron pruebas, testigos y encontraron contradicciones, paso a paso? Estaba demostrado el origen falaz de la imputación.
De haber incurrido en alguna falla esos primeros juzgadores en un tema de abuso sexual, habrían enfrentado, mínimo, la solicitud de su destitución y hasta el reclamo de su encarcelamiento por presunta complicidad con la persona exonerada. Escándalo mediático contra jueces como sucede y ha sucedido cuando se observan deficiencias. Nada. No los cuestionaron, porque seguramente había consciencia de que la sentencia estaba fundada y sin desatender el criterio de género.
Para quienes conocen la materia, tienen a la vista el empecinamiento de una de las partes de ganar el juicio al precio que sea. Encontrar al juzgador que le favorezca o sorprender su buena fe para revertir la resolución inicial. Echar mano de recursos extraordinarios, extraños, opacos, presionar.
Y la parte que sabe que ha podido probar su inocencia, lo único que pide es actuación conforme a Derecho. Imparcialidad y verticalidad, valores que por ley y convicción deben caracterizar a cualquier juzgador.
Si se llegó al extremo de considerar el beso en la mejilla como abuso sexual, del juzgador se puede esperar lo que sea. Admitir acusaciones que en una reconstrucción de hechos serían de imposible realización. Aceptar no la primera, no la segunda, sino la tercera declaración, porque es la que daña, no importa que haya contradicción. No se dan las circunstancias de modo, tiempo y lugar. Los supuestos sucesos son en lugares públicos, tan públicos como lo sería el restaurante familiar Sanborns.
El caso está en el Séptimo Tribunal Colegiado en materia penal del Primer Circuito (179/2019) y a tiempo para que se proceda como siempre se debe proceder, con estricto apego a Derecho. Es un proceso que invita a organismos nacionales e internacionales defensores de los derechos humanos, senadores, diputados, académicos, juzgadores, estudiosos del Derecho, Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, ITAM, CIDE, Escuela Libre de Derecho, Universidad Panamericana, barras y colegios de abogados y sociedad en general, a estudiarlo y darle seguimiento, porque por ningún motivo se justifica encerrar a gente por capricho o por odio.
Es el México real que no se puede ni debe ignorar a la hora de legislar. Fundamental mirar más allá del escritorio, curul o escaño. Lo requiere la reforma judicial que va a entrar en la fase del estudio de las leyes secundarias.
La Comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti e Intersexual (LGBTTTI), en atención a principios constitucionales de igualdad y no discriminación, estaría representada en la próxima legislatura en la Cámara de Diputados.
De acuerdo con la resolución SUP-RAP-121/2020 del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el Instituto Nacional Electoral (INE) deberá garantizar la postulación de personas integrantes de grupos que históricamente han sido marginados.
La resolución es específica por lo que se refiere a indígenas y personas con discapacidad para que sean tomadas en cuenta en las candidaturas a diputados que hagan partidos y coaliciones de partidos. Los indígenas tendrían nominaciones de mayoría relativa en 21 distritos, más nueve de representación proporcional.
En el caso de las personas con discapacidad, corresponderá al instituto precisar los lineamientos. Considerar que en la actualidad el grupo solo tiene una senaduría y una diputación, aun cuando su población en el país es de 7.8 millones.
La comunidad LGBTTTI no está citada como tal en la resolución del tribunal, sin embargo, del mismo texto se desprende que tendría que considerarse.
Para la sala superior del TEPJF la “población nacional está conformada pluriculturalmente, y no solo por hombres y mujeres o por personas con discapacidad sino por una diversidad de género, de edad, de condición social, de origen étnico, entre muchos otros géneros que ameritan contar con una representación efectiva en órganos legislativos, como es el caso de la Cámara de Diputados”.
Ordena al INE “determine los grupos que ameritan contar con una representación legislativa y de inmediato diseñe las acciones o medidas afirmativas necesarias y efectivas tendentes a lograr la inclusión de representantes populares de esos grupos o comunidades, mediante la postulación de candidaturas por los partidos políticos o las coaliciones, en el entendido de que necesariamente deberá incluir a las personas con discapacidad y podrá hacerlo con todos aquellos que considere pertinente o que racionalmente puedan alcanzar un grado de representación en la Cámara de Diputados”.
Según el INEGI, la comunidad LGBTTTI tiene una población en México de 7.5 millones, el seis por ciento de 124 millones de habitantes. Se encuentra entre los 10 países con mayor número de no heterosexuales.
Como lo establece la resolución del tribunal, correspondería al INE decidir los grupos que deberá de incluir.
El tribunal dejó en claro que se trata de medidas temporales y razonables, “acciones afirmativas”, acordes con principios constitucionales. Incorporarlas a la ley sería responsabilidad del poder legislativo.
Ha vivido varias etapas en el Palacio Legislativo de San Lázaro. Ha sido tres veces diputada, actualmente senadora.
La más longeva en la historia de México, ningún otro hombre o mujer a llegado a su edad como legisladora: 90 años de edad.
Ifigenia Martínez Hernández.
Lo que voy a contar de ella, nunca antes se ha escrito en un periódico ni se ha dicho en medio electrónico. Tampoco en redes sociales.
Son lecciones de vida que la describen como mujer lúcida, inteligente y congruente.
Fue la primera mexicana con estudios de posgrado por la Universidad de Harvard. Doctora en Economía, maestra de políticos de distintos partidos.
Mujer distinguida por su belleza y sus conocimientos.
En los setentas, por su destacada trayectoria como economista, el PRI la hace diputada federal. Le asignan la presidencia de la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados.
Como presidenta de dicha comisión, votó en contra de una iniciativa del entonces presidente de México, José López Portillo.
La diputada Ifigenia Martínez optó por ayudar a los jornaleros agrícolas, inconformes con la política de gobierno hacia el campo. No se alineó como lo hicieron sus demás compañeros de partido.
José López Portillo le reclamó a Muñoz Ledo, quien era dirigente del PRI, por permitir que la diputada Ifigenia Martínez votara en contra de la propuesta del presidente. Porfirio la defendió por votar en conciencia y razonadamente. Destacó sus ideales y congruencia.
Cuando termina su periodo como diputada, el presidente López Portillo intentó hacerla subsecretaria, pero en ninguna secretaría la querían. No la querían por su rigor académico, por su inteligencia y porque sabía defenderse. El mismo presidente llegó a decirle que era difícil colocarla en alguna dependencia, por ser muy exigente con su trabajo y con sus compañeros.
Por fin le encuentra lugar. López Portillo la hace embajadora adjunta de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El embajador titular era su amigo Porfirio Muñoz Ledo.
En esta etapa se fortalece la amista entre Ifigenia y Porfirio. No solo se tratan como grandes amigos, sino como hermanos.
Ifigenia Martínez Hernández fue fundadora del PRD. En su casa de Coyoacán en la Ciudad de México se reunían los perredistas.
Frente a donde se sentaba, ponía un grillo de plata. Decía que la grilla se hace de noche.
También tenía el detalle de colocar una fotografía de Benito Juárez en su sala, porque sabía de la admiración de Andrés Manuel López Obrador por el benemérito de las Américas.
La ahora senadora fue amiga del cubano Fidel Castro. En el 2004 viajó a la isla de Cuba con el encargo de entregarle un reconocimiento a Fidel. La medalla Benito Juárez. La maestra llegó a Cuba acompañada de su familia.
Después de la solemnes ceremonia, Ifigenia, sus hijos y nietos regresaron al hotel. Eran las ocho de la noche. Mandó a dormir a toda la familia. La maestra se fue a la cena con el comandante Fidel Castro y todo su gabinete. Ifigenia retornó al hotel a las tres de la mañana.
La maestra ha sido candidata a recibir la medalla Belisario Domínguez, la máxima presea que otorga el Senado.
Sin duda, Ifigenia Martínez Hernández, personaje que ha trabajado varias veces en el Palacio Legislativo de San Lázaro, es una mujer de Estado.
El Instituto Nacional Electoral (INE) si logra que sus lineamientos o reglas para la reelección de diputados se apliquen en las elecciones del próximo año, en vez del acuerdo aprobado por mayoría en la Cámara de Diputados, pondría en jaque al grupo parlamentario del Partido Encuentro Social.
Sus 10 diputados y 13 diputadas, no podrían reelegirse, porque las reglas que plantea el INE establecen que solo pueden considerar esta opción si lo hacen por el mismo partido. Encuentro Social perdió su registro en el 2018, al no alcanzar el tres por ciento de la votación nacional en ninguna de las elecciones (diputados, senadores y presidencia de la República). A pesar de ello, ganaron 23 curules de mayoría relativa.
Cierto que el mismo grupo político acaba de volver a obtener su registro, con otro nombre, similar pero no igual. Ahora la “nueva” organización se llama Partido Encuentro Solidario (PES). Las mismas siglas, nada más que ahora no es “Social” sino “Solidario”.
En este contexto, con las reglas del INE, en caso de ser aprobadas y ratificadas por la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el PES tendría que considerar otros candidatos, los actuales diputados quedarían anulados porque en 2018 el partido tenía otro nombre.
Claro, si se impone el acuerdo aprobado por la Cámara de Diputados, los 23 legisladores no tendrían ningún impedimento para reelegirse, lo podrían hacer por el PES o por cualquier otro organismo político. Tampoco estarían obligados a tratar de reelegirse por el distrito en el que compitieron hace tres años, tendrían la opción de cambiar.
El caso del PES es especial, porque en los hechos, salvo por la variación en el nombre, los militantes y dirigentes de 2020 son los mismos de 2018. Sin embargo, tendrían que sujetarse a las reglas que finalmente apliquen.
Los legisladores pesistas estarían cruzando los dedos para que prevalezca el acuerdo aprobado por todos los grupos parlamentarios. Tendrán que esperar a que se resuelva la controversia jurídica que está en puerta, porque evidentemente el INE va a seguir adelante con su proyecto de lineamientos.
La consejera Claudia Zavala, presidenta de la Comisión de Prerrogativas, ya anticipó que medirán el alcance jurídico del acuerdo de los diputados. Marcó la diferencia entre un acuerdo y ley. Lo que aprobaron los diputados no fue reforma a ninguna ley, no es ley y por lo tanto no tiene dicho rango.
No pasará mucho tiempo para conocer el resultado de este diferendo. Llegará a la cancha de los magistrados del TEPJF.
Por lo pronto hay que decir que esto es un preludio de cómo se avecinan los jaloneos entre partidos y autoridades por las elecciones del próximo año. No olvidar que también está en el terreno judicial la decisión del INE para que los partidos, por obligación, nominen a mujeres en siete de los 15 estados donde habrá elección de gobernador. En el Senado, donde la mayoría es coordinada por Ricardo Monreal, es visto como un exceso en la interpretación del criterio para la equidad de género.
La estrella de Porfirio Muñoz Ledo ya no brilla como en sus mejores tiempos, como cuando despuntaba como presidente del PRI, como parte de la Corriente Democrática al lado de Cuauhtémoc Cárdenas e Ifigenia Martínez o como dirigente nacional del PRD.
Tampoco se puede dejar de mencionar su paso por las secretarías del Trabajo y de Educación Pública, ni su trayectoria como diplomático y mucho menos como legislador, senador y diputado. Tampoco su aspiración fallida a gobernar Guanajuato y más atrás, por un instante, la idea de ponerse la banda tricolor como presidente de México.
Personaje de larga historia, con bajas y altas, incomparable. Por méritos propios alcanzaría el nivel de estadista.
La estrella que ya no brilla en toda su intensidad, le alcanza para competir por la presidencia de un tercer partido político, de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Tampoco está opaca y lejos de entrar a la oscuridad, ilumina lo suficiente para llamar la atención de sus compañeros.
Suma 87 años de edad. Solo el paso de los años ha podido minar su fortaleza física, como sucede con todos. Imposible tener la vitalidad de un jovencito. El precio que nadie se salva de pagar. Sin embargo, su lucidez, ya la quisieran veinteañeros, treintañeros y cuarentones. Expone y razona como pocos en la política nacional, lo que de ninguna manera quiere decir que sea perfecto.
Estuvo al frente del PRI en los tiempos hegemónicos del partido de Estado, cuando no era preocupación democratizarlo. Incluso en esa etapa el priísmo canjeó una senaduría por el gobierno de Nayarit. Había perdido la elección estatal con el Popular Socialista. El líder socialista Jorge Cruickshank García aceptó a cambio seis años en el Senado.
Como presidente del PRD no consiguió armonizar las “tribus” que hay al interior del partido. Hasta la fecha, por sus pleitos y fisuras, han sido la parte débil de la organización.
Ahora suspira por la dirección de Morena, partido que ha reproducido el fenómeno perredista de las tribus, todos contra todos, al grado de que tienen que resolver su proceso de elección con una encuesta organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE).
El candidato a vencer es el diputado Mario Delgado, encaminado para que gane la encuesta y la presidencia de Morena, pero nada es hasta que es, como dice el controvertido filósofo de Güemes.
Si llegara a ganar Porfirio Muñoz Ledo, impondría récord mundial, por ser el político que ha dirigido tres partidos.