Boletas del IFE recicladas

Sociedad
Typography

Más de mil 200 millones de pesos a la basura, en el desperdicio. Eso fue lo que gastó el Estado para la conservación de las boletas electorales del 2006.

Después de múltiples reclamos e impugnaciones judiciales, en instancias nacionales e internacionales, finalmente se desechó la petición de tener acceso a dichas boletas, que muchas de ellas, por el deterioro del paso del tiempo, ya no fueron útiles ni para el reciclaje.

Casi siete años almacenadas, esperando la resolución de las autoridades, hasta agotar el último tribunal. Ninguna autoridad consideró que era válida o aceptable la solicitud de tener acceso a las boletas.

Independientemente de que fue una decisión apegada al marco jurídico, sirva esta experiencia para futuros casos, para que no se repita la historia cuando las mismas leyes mexicanas marcan el camino de lo que corresponde hacer si hay dudas sobre el resultado del proceso.

En el 2006 el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación hizo un recuento parcial de votos en el marco de la ley. No encontró nada que revirtiera la tendencia que favoreció al candidato del Partido Acción Nacional, hablando estrictamente de las boletas.

Los mil 200 millones de pesos, en este momento, serían de gran ayuda para los damnificados por inundaciones.

Arturo Zárate Vite

 

 

Maestro en Periodismo Político por la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Titulado con mención honorífica.

Se ha desempeñado en diversos medios, entre ellos, La Opinión (Poza Rica, Veracruz) Radio Mil, Canal 13, El Nacional, La Afición y el Universal.

Más de cuatro décadas de experiencia, especializado en la información y análisis político.

Ejerce el periodismo desde los 16 años de edad.

Premio Nacional de Transparencia otorgado por la Secretaría de la Función Pública, IFE, Consejo de la Comunicación, Consejo Ciudadano por la Transparencia e Instituto Mexicano de la Radio.

Su recurso para la protección de los derechos políticos electorales del ciudadano logra tesis relevante en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con el fin de conocer los sueldos de los dirigentes nacionales de los partidos.

Además, ha sido asesor de la Dirección General del Canal Judicial de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y Coordinador General de Comunicación y Proyectos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Autor del libro ¿Por qué se enredó la elección de 2006, editado por Miguel Ángel Porrúa.